miércoles, 2 de mayo de 2018
Si hubiera sido
Si las veces que deseé ser pájaro
hubieran sido...
No habría cielos.
Para alejarme. Tal vez de mí.
Si las veces que deseé destruir
hubieran sido...
No quedaría tierra. Firme.
A lo otro, a ti y a mí.
Si las veces que necesité escribir
hubieran sido...
No habría árboles de tanto papel
minado. Que hubiera sido
y nunca es.
Si las veces que necesité correr
hubieran sido...
Nada de tuétano albergarían
ya mis 208 huesos,
secos de pura huida.
Si las veces que caí
me hubiera quedado...
queda...
manto de células secas mi cuerpo.
¿Hubiera alimentado la tierra
mi pasto,entonces?
Tierra donde los árboles se anclarían
y alzar sus ramas al cielo
Cielo de pájaros surcado,
de alas enteras, de picos y patas
de luchas y enredo.
De ciento que vuelan
y uno que para.
Que para y se vuelve
la sombra a su cara.
Y luego se pierde
y ya no remonta
Se pierde y se alejan
y a la deriva, su cuerpo, de nave que flota.
¿Permanecería, entonces, intacto el núcleo
de los huesos que me yerguen?
208 eran.
¿Y qué fuerza
infernal y reiterativa
me ha llevado a empezar
una tras otra vez?
Desechada la parte salvaje,
¿qué queda si no, a veces,
una masa robotizada,
inteligente, mas temerosa,
alojada en el seso de uno?
Como una bala de ludópata ruso.
Adicción estructural
Más de una vez siento el tiempo que ya (me) ha pasado como tonelada que me aplasta. Que me pesa, que me angustia, que me paraliza. Más de una vez y de dos y de tres.
Miro atrás: 2003, 2006, 2007, 2008, 2010, 2011, 2012, 2014...pasan, pesan, pisan. Y siento que tengo que pasar por los mismos sitios continuamente. Ya pasé por aquí, eh, ya pasé por aquí, ¿nadie me responde? Y desespero en la compañía de los clavos de Quevedo, de los miedos de Lorca, las manías de Juan Ramón, las fiebres de Unamuno, el madero de Jesús, el arrepentimiento de Lope, la pobreza de Cervantes, el bajón post(-)subidón de Darío, la morriña de Rosalía, el planto de Pleberio, los lamentos de las jarchas, las alboradas que se lo llevaban... (2016)
Dame
aunque sea
un gramito
de drama.
(2018)
Miro atrás: 2003, 2006, 2007, 2008, 2010, 2011, 2012, 2014...pasan, pesan, pisan. Y siento que tengo que pasar por los mismos sitios continuamente. Ya pasé por aquí, eh, ya pasé por aquí, ¿nadie me responde? Y desespero en la compañía de los clavos de Quevedo, de los miedos de Lorca, las manías de Juan Ramón, las fiebres de Unamuno, el madero de Jesús, el arrepentimiento de Lope, la pobreza de Cervantes, el bajón post(-)subidón de Darío, la morriña de Rosalía, el planto de Pleberio, los lamentos de las jarchas, las alboradas que se lo llevaban... (2016)
Dame
aunque sea
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(2018)
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